. JUAN.- Lo sé. Y a cambio, ¿qué me exigirían? JAVIER.- Nada. ERNESTO.- Eso es, nada. JAVIER.- Su integración. O su complicidad, como prefiera. ERNESTO.- ¿Quién habla de complicidad? No estamos planeandoundelito... JUAN.- Ya. La verdad es que me encantaría aceptar. Dinero, fiestas, mujeres exquisitas como las aquí presentes... Un mundo tentador. (Bebe un sorbo de whisky y eso