. JAVIER.- Eso me tranquiliza. JUAN.- Podría ser mi amigo, a pesar de todo. JAVIER.- ¿No soy nocivo ni maligno? ¿No tengo desequilibrios sexuales? JUAN.- Tiene... «caprichos». ¿Pero quién no? Nadie seatieneestrictamentealasreglasencaminadasala procreación. JAVIER.- Sería muy aburrido. JUAN.- Yo también, modestamente, he tenido mis caprichos. Sin compararme con usted,