que se resigne a quedarse en esta condición, vacía e innocua, sino un auténtico fetiche, capaz de atravesar siete cotas de malla del mejor nominalismo, un ídolo, con toda la conmoción afectiva y mental que ello comporta. Los impulsos de autoafirmación, apaciguados, sublimados, educadosoreprimidosenelindividuoporlaculturaylasinstituciones,se toman su revancha disparandose ocultamente en ese tipo de sujetos, sujetos fetiche, como el pueblo, la patria, la estirpe, la causa, en los que el yo individual se desdobla, se proyecta, se enajena y se potencia, reconstituyéndose
RAT:087.19
EDUCAR - Hacer que alguien desarrolle sus facultades intelectuales o morales