, medio dormida, ¿qué más te da? ADELA.- (Ríe.) Aquí tenías una sonrisa entre maliciosa y altiva. EMILIA.- Dos cualidades que adquieres forzosamente en el matrimonio. ADELA.- ¡Qué diferentes somos! Anoche lo pensaba: por fueravascambiandoylonotas,peropordentrotetransformas y ni te das cuenta. Hasta que un día, ¡sorpresa!, compruebas que las peores arrugas no están en tu cara, sino en tu cerebro. Y no digo el corazón porque ya ni te queda.
CIN:080.27
CAMBIARI.1 - Mudar, alterar, poner(se) de manera distinta a como estaba