Y todo para qué? Para elaborar un monstruo prodigioso. ¿Quieres oír el final del cuento, Adi? ADELA.- Será el que tú quieras escribir. JAVIER.- (Se incorpora y va a servirse una nueva ración de whisky.)Ysucedióque,andandoeltiempo,unodeaquellos niños se convirtió en un oscurísimo profesor borrachín que no entendía el idioma de los nuevos físicos y la niña... ¿En qué te has convertido tú, Adi?