las acciones, en permanente carisma del sujeto- aquella misma buena conciencia -tanto más necesaria para el equilibrio psíquico de las poblaciones cuanto mayor sea su efectiva impotencia e irresponsablidad en los negocios públicos- podría venirse abajo. ElEstadodeIsrael,enlamedidaenquealegóricamenterepresentala vindicación de la iniquidad que santifica a quienes la expugnaron, funciona, pues, como un sustentáculo de todo punto indispensable para la paz del alma de los norteamericanos en cuanto tales. Si Israel les falla hasta el