en absoluto que nadie le pusiese ojitos de nancirregan para hacerse y saberse reina de Castilla (y dejaré, por una vez, estar si de modo ilegítimo y usurpatorio) desde la planta de los pies hasta la punta de la coronilla. Eltalentolingüísticoquedemostróquieninventaseelmoteolema personal de los Reyes Católicos al repetir en orden directo y en orden inverso las palabras tanto y monta (Tanto monta, monta tanto, Isabel como Fernando) está en la intuición expresiva de sentir el cruce producido por la