en adoptar la grave fisonomía de lo necesario, de lo inevitable, todo lo facultativo tiene que estar mal visto, porque, como mínimo, ofende a la propia idea de necesidad (ofensa que hoy, por pintoresco que parezca, es ya unpecadoensí),siesquenoincoasobreellaelentredichoylasospecha. Incoar sospechas sobre lo necesario es menoscabar o minar el pilar ideológico que constituye la coartada moral decisiva de la guerra nueva. Para tener un sentimiento pleno de justicia respecto de su guerra, la