cubierto ya de nieve en muchos de sus puntos. El paisaje, el templo y, sobre todo, las maravillosas pinturas al fresco del interior, atrajeron en seguida la atención de los visitantes. Tras las primeras explicaciones del guarda, el grupo se dividió en trespartes.Adrianaprefirióseguirtomandoelsol en el exterior mientras continuaba solicitandole al guarda viejas historias de aquellos parajes. Sobre todo se sintió interesada por los detalles de la famosa batalla del Monte Belasica,