la ausencia de Marescu, por su visita al Consulado. Dentro de ella la pasión volvía a apaciguar, una vez más, a la ideología. La mansa pasión y aquella obstimada actitud de mantenerse como un perro guardián entre Jano y Betina la mantenían inmovilizada.Peronosecontuvomásyacabóalzando la cabeza para preguntarle a Jano con aparente despreocupación: --¿Vas a ir o no vas a ir por fin a Grecia? --Claro que iré.
CAR:154.29
CONTENERII.1a - Dominar [alguien] [un movimiento o impulso de sí mismo o de otra persona]