todo el mundo corría en dirección de la plaza." Apresuró el paso, con la determinación de que era capaz cuando estaba una vida de por medio, hasta que alguien que corría en sentido contrario se compadeció de su desvarío. --Nosemoleste,LuisaSantiaga--legritóalpasar--. Ya lo mataron. BAYARDO San Román, el hombre que devolvió a la esposa, había venido por primera vez en agosto del año anterior: seis meses antes de