Texto contextualizado: |
de nuestras manos sobre la húmeda balconada también de piedra; una piedra que no transmitía sensación alguna, música alguna. »Cuando acabado el entreacto volvíamos a la penumbra del teatro, la realidad seguía manteniendose distante y engañosa en la representación escénica. Lo último que nosotros hubiéramos podido imaginar es que cuanto se cantaba y se narraba en el escenario fuera otra cosa que fruto del Arte, de la ensoñación. Podía ser, por ejemplo, La Bohême la historia que aquella noche se desarrollaba musicalmente |
CAR:097.07 |