algún árbol. Ahora se oía distante su griterío. A la mente absorta, obsesiva, de Jano, le agradaba verse interrumpida por el griterío feliz. Las aguas del lago estaban inmóviles, como muertas. De vez en cuando pasaba silenciosamente alguna bandadadegrullasytrescisneshundíansuspicos en ellas. Luego, la neblina fue en aumento y el lago se tornó más lechoso. Era un espectáculo indescriptible. Las aguas y el cielo se volvieron de una blancura
CAR:014.22
HUNDIR - Hacer que algo se vaya al fondo, deformar una superficie, derrumbar una construcción