con nuestra riqueza nacional. --¿Y el volumen de la producción brasilera? --Embustes de los norteamericanos, que no nos quieren. ¿O usted me va a negar, recluta, que existe una conjura foránea, perfectamente orquestada, contra los criollos? --¿Noleconvendríadarseunavueltaymirarcon sus propios ojos? Hoy por hoy, con el costo de la vida, resulta más acomodado tomarse un avión y visitar Río, que no salir de estas cuatro paredes. Dicen