formalidad era el distintivo, en efecto, de aquel «american way of life» tan atractivo como desaconsejado, y a este respecto es muy significativo que a las chicas de las que venimos hablando se las llamara con frecuencia ademásde«topolino»,«niñasswing»,aludiendoauna nueva danza que, junto al buguibugui, se introdujo en la España de los cuarenta y que escandalizaba por la arritmia de sus cabriolas: ¿Es que nosotros hemos de hacer cabriolas como cualquier payaso