o de cartón, que se plegaba inerte a sus caprichos y nunca rechistaba. La acunaban, le hacían comiditas y la reñían porque había dejado su ropa tirada por el medio, en revancha mimética de las reprimendas que ellas mismas recibían de sus madres. Este tipo de juegos solíaprovocarcomentariosaprobatorioscomoelde«¡Quémona, por Dios, parece una mujercita!», que a veces musitaban las visitas, igual que si estuvieran presenciando una representación teatral de su agrado. En general la muñeca se consideraba un invento
USO:120.39
PROVOCARI - Hacer ocurrir como reacción o respuesta