que constituían el último valladar contra el pecado. Pero esto ya eran palabras mayores, las de la ropa interior. No iban generalmente por ahí los sueños de amor de la chica pudorosa, que se arreglaba para gustar. Sus aspiraciones eran más limitadas, superficialesymodestas,yafectabanaotraszonasdel cuerpo menos erógenas. Una de ellas, la más importante, era la cabeza y su ornato. Con relación al pelo, primer reclamo erótico y tentación de caricia
USO:132.29
AFECTARI - Producir un efecto [sobre algo o alguien]. Concernir