, unas monedas y un lingote de oro-, los judíos, que podían poner en línea un ejército de hasta 40.000 guerreros, sufrieron un revés en el que perdieron 36 hombres, Josué se lamentó amargamente ante Yavé Sabahoz por la derrota y, descubierta la prevaricación, Aján fuelapidadocontodasufamiliayquemadosloscadáveresconsutienda, sus bestias y sus bienes. Se ha dicho que las manifestaciones más grandes contra la actual guerra de Líbano han sido en el propio Israel, pero la queja era, al parecer,