Texto contextualizado: |
y resbalaba por la piel que transpiraba sin tregua. Era como esas venas cianóticas emergiendo en la piel lívida de un enfermo, rugosas cual viejas raíces, cruzando horizontalmente la pantalla, sucediendose de pronto azules o ennegrecidas según los espasmos luminosos que de pronto habían comenzado a alterar y oscurecer ligeramente la nieve grumosa de la pantalla. Las celadoras sombras de la habitación parecieron mostrar unas formas pardas y negruzcas de aves de presa repentinamente despertadas por un aviso ante el que rebullesen sordamente |
MIR:052.14 |