esencial, que era de tipo económico. Nuestra ambivalente actitud hacia los Estados Unidos descubre que, bajo las diatribas y condenas de tipo moralista con que España juzgaba a aquel país tachado de frívolo, latía el resentimiento con que siempre han mirado los pobres a los ricos. Estosenotabamásquenadaenlosasuntosdondedeverdad entraba en juego el dinero, como era la industria cinematográfica. Por mucho que, de acuerdo con la mayoría de los testimonios, lo más urgente fuera darle al cine español