en el fondo ético y religioso del pueblo norteamericano: es un manantial obstruido pero no cegado. La política exterior de los Estados Unidos ha sido zigzagueante y errática, con frecuencia contradictoria y, a veces, incoherente. El principal defecto de esta conducta, suinconsistenciabásica,noresideúnicamenteen las fallas de los dirigentes, con ser muchas, sino en ser una política más sensible a las reacciones del interior que a las del exterior. Sus objetivos son contener a la