Mercedes. Miguel estaba en clase y Onésima les interrumpió para anunciarles con voz misteriosa: «Otra vez está aquí». «¿Quién?», preguntó Carlos. «El abuelo del niño.» «Muy bien, gracias», repuso fríamente el profesor, ydictóaMiguelunnuevoejercicio.Acabadalaclase, cuando ya Carlos se disponía a marcharse, Onésima dijo con triunfal despecho: --Esta vez se ha llevado dos candelabros de plata
TER:099.02
DICTARI - Emitir un mensaje en voz alta, normalmente, para que otro lo copie