hombre, rechaza con su manita la cucharada de papilla ofrecida por la madre y clava en el viejo sus redondos ojos oscuros. Suelta un gruñidito, manotea un momento y, al fin, se digna abrir la boquita a la comida. -¡Quégrande!-acabaporexclamarelviejo. -¿Verdad, papá? -se ufana la madre-. ¡ Y solamente tiene trece meses! « ¡ Trece meses ya! », piensa el viejo, sin rehacerse
SON:032.08
EXCLAMAR - Decir o hablar con intensidad y vehemencia