consuelo de descargarla contra nada ni nadie. En ese momento comprendió que la deseaba viva para hacerle pagar con su muerte el horrible padecimiento en que le había dejado: Hasta ese punto le despojaba de cuanto tenía y le entregaba, desnudo, en manos de quienes habíandecondenarlearenunciaralfuturo por el resto de sus días.) Vuelve violentamente la vista hacia el sofá. El cuerpo de la mujer parece haberse descoyuntado por efecto de las horas