el color del cielo, pero no el aire.» El aire seco de la meseta no podía confundirse con el de la isla, humedecido por millares de partículas mediterráneas. «Tampoco el olor.» Un amargo dulzor de almendro, el aroma medicinaldelassabinas,golpearonsuolfatoenelrecuerdo. No, tampoco el olor. Ni el silencio. Ahora mismo, aquí, ni un coche circulaba por la estrecha carretera que llevaba a otra más ancha y finalmente, tras vueltas
JOV:078.15
GOLPEAR.4a - (Fig.) Provocar [un recuerdo, imagen, idea o algo similar] impresión emocional o física [a alguien]