cargo supremo a la persona más apta para representarlas: un hombre capaz de escuchar la voz del pueblo, conocer sus aspiraciones y anhelos, identificarse plenamente con él. De decir: yo soy el pueblo, y dialogar con él, consigo, en el espejo;deeliminartodoasomodecontradicciónentre ambos gracias a la exclusión de cualquier tipo de instancias intermedias; de asumir su yo infinito, multitudinario, y asegurar sin complejos su progreso y felicidad. En