. Los norteamericanos y los europeos tienen que aprender a oír el otro lenguaje, el lenguaje enterrado. El lenguaje de Jomeini es arcaico y, al mismo tiempo, es profundamente moderno: es el lenguaje de una resurrección. El aprendizaje de ese lenguaje significa redescubriraquellasabiduríaquehanolvidado las democracias modernas pero que los griegos nunca olvidaron sino cuando, cansados, se olvidaron de sí mismos: la dimensión trágica del hombre. Las resurrecciones son terribles; si hoy lo