pieza teatral tejida por la Casualidad, un autor más indiferente que malévolo. Es el mismo que, en las obras de Shakespeare y Marlowe, substituye al Destino griego y a la Providencia cristiana. La diferencia entre esos antiguos poderes y la moderna Casualidadconsisteenlosiguiente:sepresume que los actos de la Providencia y del Hado tienen un sentido, así sea recóndito, mientras que los de la Casualidad no tienen lógica, designio o significación. Cada uno de los