, señor Roncone -sonríe el joven ayudante. «O sí», piensa el viejo mientras se viste, tocando su bolsita al cuello. «Si no, ¿para qué me miran? ¡ Y aquel cabrón sin hincar el pico, Madonna mía! » Ahoranoleconducenalgrandespacho,sinoa uno pequeño, con una mesita a la que está sentado el profesor. El viejo ocupa enfrente la única silla disponible. Le sorprende que la lámpara sea un flexible
SON:228.18
CONDUCIRI.3a - Dirigir [algo o a alguien], forzosamente o no, [a un lugar]