prisioneros, y si a veces volvían a ver a uno que otro, hubieran preferido no verlos y que al igual que la mayoría se perdieran en ese silencio que nadie se atrevía a quebrar. Lo sabías de sobra, esa noche la ginebra no te ayudaría más queamordertelasmanos,apisotearlastizasde colores antes de perderte en la borrachera y el llanto. Sí, pero los días pasaban y ya no sabías vivir de otra manera
GLE:133.14
MORDER.1b - (Morderse las manos ) Estar rabioso por haber perdido una oportunidad