la permanencia, qué farsa el dejar huella de uno mismo, qué soberbio espejismo la inmortalidad! Y la emboscada más cruel: el hijo como consecuencia de un gran amor. En cuanto a ese «gran amor», he visto, al paso de losaños,cómopuedeadoptarformasdistintassindejar de ser amor. Recuerdo que el amor de mi infancia era mi madre. Me torturaba la idea de perderla; sufría cuando estaba enferma; quería vivir siempre con ella...
JOV:167.23
ADOPTAR - Tomar como propia alguna cosa (particularmente, una persona como hijo a efectos legales cuando no lo es biológicamente)