el corazón y oprimiendo la garganta, la felicidad sube hasta los ojos del abuelo. Antes de que se derrame por ellos, el viejo coge al niño y lo levanta hasta su hombro sentado en esa manaza, enemiga de los guantes, donde cabe todo el traserito infantil. Brunettinoríeypalmotea.RenatoyAndrea también aplauden. El viejo se ve como el San Cristobalón en el cuadro de la capilla, pasando al niño a la orilla de otro nuevo año, hacia muchos años...
SON:193.20
REÍR.1 - Manifestar alegría mediante determinados movimiento y ruidos realizados con la boca