, charcos... Humo y bruma, suciedad y escombros, faroles solitarios y siniestros. Todo inhumano, sórdido y hostil. Al bajar el cristal percibe un vaho húmedo apestando a basura y a residuos químicos. Se suelta el cinturón de seguridad ylealiviasentirsemásdesembarazadoparareaccionar contra cualquier amenaza. «Menos mal que la Rusca está hoy tranquila», piensa consolandose. A la enfermedad que le corroe la llama Rusca, nombre de un hurón hembra que