contempla sus manos orgulloso como nunca: «¡No las hay iguales en Milán y, además de ser tan recias, abrochan botoncitos de niño! » Por la tarde le relata el episodio a Hortensia, que le esperaba en su ático con la sorpresa de una bufanda. Ellaríe,puesporunmomentopensótambién en guantes, pero recordó esas manos. -¿ Qué lana es ésta ? Seguro que tiene química -sospecha el viejo, al sentir tanta suavidad en torno
SON:191.10
REÍR.1 - Manifestar alegría mediante determinados movimiento y ruidos realizados con la boca