de la Calabria. Valerio le abre la puerta del cochecito y el viejo se instala en el asiento, acariciando en su bolsillo ese estuche metálico que hará sonar en el lejano futuro las palabras dedicadas para siempre a Brunettino. Al niño: esa verdad Suavespisadasyunmugiditocorderildespiertan al viejo, creyendose en la majada. Pero sus ojos se abren en la penumbra a un angelito blanco que alza los brazos en la puerta, frente a la cama. El viejo se
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DESPERTARI.1 - Interrumpir o hacer interrumpir el sueño y (de)volver a la consciencia