de la estatua, sostiene casi en pie, tan alto como puede, a David moribundo para permitirle ver, allá abajo en el valle, el fascinante espectáculo provocado por los partisanos: el tren alemán de munición estallando por todos lados como una traca gigantesca... Relámpagos y detonacionesdespedazanlanoche,saltantechosdevagones en el aire, huyen despavoridos los pocos soldados supervivientes y alguno, con el uniforme en llamas, se arroja a las aguas del Crati... La hazaña es un duro