he estado enferma. A consecuencia de mi visita al Louvre, en medio de la mayor exaltación me puse a manchar una tela, agitada y con dolor de cabeza. Desatendiendo la tela, al poco rato tomé un lápiz y deseché un bocetotrasotroycomosemehabíaacabadoelpapel,recogí las hojas para dibujar tras de ellas. Nada me satisfizo. Me levanté a las cuatro de la mañana como tú lo hacías y traté de organizar la composición y seguí haciendolo