de una mesa despacio, despacito, metía sus dedos muy finos en algún intersticio y abandonaba uno de ellos allí con indefinible placer. El dedo y la hendidura se correspondían suavemente, se sumergían el uno en elotro,ysinsabercómoniporqué,latíamecomunicaba su propia excitación. Percibía por vez primera algo desconocido y misterioso. La tía Veronique respiraba fuerte como si su cuerpo rozara algo vivo y demandante, algo que nunca se iba a consumir
DIE:167.14
COMUNICARI - Manifestar, transmitir una información, sensación o conocimiento