así que toda la familia acudió alarmada. Entre consanguíneos y políticos, mayores y menores de edad, eran más de catorce. El último que salió fue Nahir Miguel, el padre, con la barba colorada y la chilaba de beduino que trajodesutierra,yquesiempreusódentrodela casa. Yo lo vi muchas veces, y era inmenso y parsimonioso, pero lo que más me impresionaba era el fulgor de su autoridad. --Flora --llamó en