Texto contextualizado: |
Ella y usted, charlando tranquilamente, con todo el tiempo por delante y haciendo planes para cenar... un día libre, en fin. Y de repente, sin más... Es extraordinario.» Pronto abandonó la Avenida por una calle lateral. Mientras lo hacía se preguntó por qué tomaba esta decisión. En toda la noche no se había cruzado con un alma viviente; ni siquiera algún perro vagabundo de trote acobardado y rabo bajo, inevitable compañía ocasional de cualquier noctámbulo andariego |
MIR:098.06 |