algunos borrachos cantando en el patio, Angela Vicario había mandado a pedir una maletita de cosas personales que estaba en el ropero de su dormitorio, y ella quiso mandarle también una maleta con ropa de diario, pero el recadero estaba de prisa.Sehabíadormidoafondocuandotocaronala puerta. "Fueron tres toques muy despacio --le contó a mi madre--, pero tenían esa cosa rara de las malas noticias." Le contó que había abierto la puerta sin