albedrío emancipado y llevado hasta su plenitud, la existencia tendría que ser sentida y enfrentada como ficción y representación hubo de ser magistralmente recogida, tres siglos más tarde, por Franz Kafka, en el teatro natural de Oklahoma,desunovelaAmérica.OtrobrevísimorelatodeKafka,titulado La partida -respecto del cual abrigo personalmente la plena convicción de que no es sino una espléndida paráfrasis del relato de la vocación de Buda-, pone en labios del que parte la siguiente respuesta a la