.- Bueno, los privilegiados también harán ¡ras, ras! con sus carísimas dentaduras postizas. Ellos dirigen la tierra desde unos pocos despachos misteriosos, pero también construyen sus refugios atómicos porque ya no dominan nada y tienen miedo. Algunos de ellossaldrándesusguaridascuandoterminelapróxima guerra y se seguirán eliminando a dentelladas. (Ríe.) ¡Ras, ras! ¡Y vuelta empezar! (Entra ROSA sonriente, con tres botellines de cerveza y tres vasos en una bandeja.)