soldado apuntandonos porque los tiros vienen de la Abadía de Monte Cassino y también le tocan al pueblo de Cassino, pobre pueblo tan fregado o más que nosotros. Los primeros días vi campesinos, pero ahora solamente han quedado los viejos que nosalendesuscasas;nadiepodrámoverlos,sólolamuerte y quizá ni ella. También en los primeros días oía yo el cencerro de las vacas, pero ahora ni los pájaros cantan, apostaría una botella a que hay un nazi aquí a treinta metros.