donde estoy tranquilo! El Chufas no le ha quitado las manos de bajo las axilas como si temiera una imposible huida. Pancho se zafa de mala manera aunque todo su coraje se lo dirija al Gringo. --¡Váyanse mucho al carajo! --OralePancho,notemandes. --¿Quién les dijo que vinieran? A ver ¿quién? Yo no los mandé traer. --El Chufas te empezó a buscar. --Y al Chufas ¿qué?