me vava a encontrar bien en la capital; aunque tengo muchas ganas de entrar en la Universidad. --No sé si me iré, Betina --añadió Jano animado por el mayor tono de intimidad de ella--. Aquí he puestounpocodeordenenmiinterior.Hansucedido en mi vida cosas que yo hoy no te he contado. ¿Sabes? He sufrido mucho. Jano había impresionado a la muchacha con su tono difuso, pero convincente. Se sorprendió