compulsivos. Pero se aferró a esa palabra: --Fuga. Fuga. La hora de cierre de los Grandes Almacenes junto con otros cientos de ciudadanos. Nunca hubiera sospechado que le encontraría allí. Siempre temió encontrarlo en cualquier parte, lo temía comoaundolor.Debiósucederensegundospero lo percibió con tal detenimiento que le pareció una escena interminable. Sí, allí estaba. Antes de ver sus ojos reconoció la mano tendida al azar ante la gente apresurada