menos que de los problemas psi-co-ló-gicos de una chica en el momento de la pubertad. No empieces a -autotorturarte, ya basta con la verdadera, creo. -Lo sé, Noemí, lo sé, carajo. Pero siempre es igual, siempre tenemos que reconocer que todo eso sucedióenotroespacio,sucedióenotrotiempo. Nunca estuvimos ni estaremos allí, donde acaso... (Me acordé de algo leído de chica, quizá en Augustin Thierry, un relato de cuando un santo