fueron sus hermanos. (Emilia queda como paralizada, anonadada. Sólo puede susurrar.) EMILIA.- No... EDUARDO.- No vio a nadie. Por eso se contradijo y se negó a hablar... Sólo estuvo con sus hermanos. EMILIA.- Jesús... (Sinsoltarla,sincesardegirarconAdela,entranJaviery Ernesto, seguidos por Ramón. Adela es una mujer bellísima. Emana de ella un tremenda sensualidad nada premeditada, sino espontánea. Y la edad no ha mitigado ese potente