Texto contextualizado: |
tenía que confesar por vez primera y aún no sabía que iba a decir, porque, de pronto, pensé que quizás aquella ceremonia que me esperaba pudiera despertar en mí una fuerza semejante a la que tú ya me habías mostrado. Mientras me rizaban el pelo con unas tenazas me quemaron la frente en un descuido. Mamá estaba aún más nerviosa que yo y Josefa parecía dirigirlo todo. Agustina ya había puesto la mesa para el desayuno en el comedor que nunca se usaba, junto a tu estudio. |
SUR:022.02 |